Las maravillas arquitectónicas del mundo animal
El Empire State,
la Opera de París, el Coliseo romano... Infinitas son las muestras que
nos permiten admirar con creces la obra arquitectónica de la humanidad.
Pero bajemos la escala y agudicemos la vista. El mundo animal está
repleto de maravillas arquitectónicas a pequeña escala, y hoy nos
metemos en su mundo para descubrirlas.
1. Hacemos una primera parada en el mundo de los insectos
tricópteros, auténticos arquitectos a pequeña escala. Tomando como
criterio la arquitectura, podemos dividirlos en tres subgrupos: los
tricópteros que construyen fundas, los tricópteros que construyen
refugios y los tricópteros que directamente no construyen.
Utilizan
para ello materiales acuáticos como plantas, arena, rocas y su propia
seda para adherirlos. El resultado son estructuras similares a las de
los gusanos, pero con la diferencia de que la materia prima es otra, y
además sus construcciones son portátiles.
2. Bueno, hablar de las hormigas es de perogrullo en este sentido.
Construyendo sobre tierra, bajo tierra o hasta en los árboles, las
hormigas han desarrollado el arte de la arquitectura en dimensiones
sorprendentes, al punto de llegar a construir cosas como esta.
3. Las abejas son otras de las favoritas. También trabajando en
conjunto y equipo, los panales de abejas conforman todo un universo
aparte en la arquitectura animal. Sus panales permiten almacenar miel,
dar cabida a la colonia en sí y criar nuevos miembros.
4. En el ámbito socio-animal, las termitas tampoco quedan fuera de la
bolsa. Lo maravilloso de su arquitectura es la altura que suelen
alcanzar sus nidos, estructuras elaboradas a partir de elementos del
suelo, celulosa y saliva. Los nidos tienen en su interior multitud de
túneles que equilibran el comercio de CO2 y O2 dentro y fuera de él.
5. Los pájaros tejedores tienen adjudicado su nombre por algo. Éstos
construyen nidos permanentes en los árboles y otras estructuras en lo
alto. Estos nidos pueden albergar docenas de familias de pájaros, con
muchas generaciones a la vez dentro de sí, conservando una temperatura
ventajosa para la comodidad de sus habitantes.
6. Culminamos con el sapo de los árboles. Estos sapos se encuentran
en paisajes húmedos de selva, y normalmente viven sobre los árboles.
Construyen refugios sedosos individuales o para pocos individuos, poco
estéticos pero bien efectivos para su protección y comodidad.
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